El contrato de alquiler es una herramienta clave para proteger tu propiedad cuando decides alquilarla a una empresa que aloja temporalmente a sus empleados. En el caso del alquiler temporal para empresas, es fundamental contar con un contrato claro, completo y adaptado a este tipo de arrendamiento, para evitar malentendidos, incumplimientos o problemas legales.

En Homyspace, ofrecemos contratos de arrendamiento temporal diseñados específicamente para proporcionar seguridad tanto al propietario como a la empresa arrendataria. Además, nuestro equipo asesora en cada paso del proceso contractual, garantizando que cada cláusula esté bien definida y que se cumpla la normativa vigente. 

En este artículo, analizamos las cláusulas esenciales que todo contrato de alquiler a empresas debe incluir para garantizar la máxima protección de tu propiedad.

Identificación completa de las partes

El contrato de alquiler debe incluir los datos completos del arrendador (propietario o su representante) y del arrendatario (empresa o autónomo). En el caso de una empresa como arrendataria, deben figurar su NIF, dirección fiscal y el representante legal. Esta información proporciona seguridad jurídica y permite identificar a los responsables legales ante cualquier eventualidad. 

Objeto del contrato y uso del inmueble

Debe detallarse la dirección completa del inmueble y su equipamiento. Además, en los contratos de Homyspace, se especifica que la propiedad está destinada exclusivamente al alojamiento temporal de los empleados de la empresa, cuyas identidades se incluyen en el contrato o se deben comunicar al inicio del arrendamiento. Esta cláusula protege al propietario contra usos no autorizados o cesiones inapropiadas.

Si el contrato de alquiler a empresas no especifica de forma clara el uso, pueden generarse situaciones conflictivas que afecten al buen mantenimiento del inmueble o a la convivencia en el edificio.

Duración del contrato y prórrogas

El contrato de alquiler debe establecer claramente el periodo de alquiler. En Homyspace, los contratos temporales suelen ser por semanas o meses, con posibilidad de prórroga si se notifica con al menos un mes de antelación. También se contempla la opción de resolución anticipada por parte del arrendatario, siempre que se respeten los plazos de preaviso o por razones justificadas como restricciones de movilidad o cancelaciones de proyectos.

Incluir esta flexibilidad beneficia tanto al propietario como a la empresa, adaptándose a cambios en la duración de los proyectos o desplazamientos de los empleados.

Renta, forma de pago y fiscalidad

El contrato debe especificar:

• El importe exacto de la renta (mensual o total).

• Si el precio incluye suministros, limpieza final, etc.

• El método de pago (normalmente transferencia bancaria) y el plazo (generalmente dentro de los primeros 5 días del mes).

En Homyspace, el contrato de alquiler a empresas puede estar sujeto o exento de IVA, dependiendo del uso del inmueble y el tipo de empresa, y se contempla la obligación de emitir factura. Esta transparencia fiscal refuerza la confianza y facilita la gestión contable tanto para arrendadores como arrendatarios.

Inventario y estado del inmueble

En los contratos de Homyspace se incluye un listado detallado de las características del inmueble a modo de inventario, proporcionando así una referencia clara sobre el estado y equipamiento de la vivienda. Esta práctica aporta seguridad y claridad, ofreciendo una solución eficaz para ambas partes.

Además, un inventario bien estructurado es imprescindible en cualquier contrato de alquiler a empresas si se quiere evitar disputas al finalizar la estancia.

Responsabilidad en el uso y mantenimiento

El contrato debe aclarar qué reparaciones y gastos asume cada parte:

• El arrendador se responsabiliza de las reparaciones estructurales y de garantizar la habitabilidad de la propiedad.

• El arrendatario debe mantener el inmueble en buen estado y hacerse cargo de los daños causados por un uso indebido o el desgaste por uso ordinario.

También se prohíbe realizar obras sin autorización, subarrendar la propiedad o cambiar el uso acordado. En Homyspace, todas estas condiciones quedan reflejadas claramente en el contrato de alquiler para asegurar una correcta convivencia y el buen estado del inmueble durante toda la estancia.

Obligaciones del arrendatario

En los contratos de Homyspace, el arrendatario se compromete a:

• Usar el inmueble exclusivamente para alojar a los empleados designados.

• No fumar ni introducir mascotas (salvo acuerdo explícito).

• No manipular instalaciones, realizar reformas ni colocar carteles o rótulos.

• Cumplir con las normativas de la comunidad de vecinos y comportarse de manera responsable.

Este apartado del contrato de alquiler ayuda a evitar conflictos con los vecinos y protege el estado del inmueble. 

🧾 Cómo modificar un contrato de alquiler a empresa

Modificar un contrato de alquiler a una empresa es un proceso sencillo, pero debe hacerse por escrito para que tenga validez legal.
Si el contrato original fue firmado entre el propietario y la empresa —no con el empleado directamente—, cualquier cambio debe reflejarse en un anexo o adenda contractual.

Algunos de los motivos más habituales para modificar un contrato son:

• Ampliar o reducir la duración de la estancia.

• Cambiar a los empleados que ocuparán la vivienda.

• Ajustar el precio del alquiler o las condiciones de pago.

• Añadir o eliminar servicios incluidos (como limpieza, suministros o mobiliario).

El nuevo documento debe indicar qué cláusulas se modifican, la fecha de entrada en vigor y estar firmado por ambas partes (propietario y empresa).
En Homyspace, todas las modificaciones quedan registradas de forma digital, con trazabilidad y validez legal, para evitar conflictos futuros entre empresa e inquilino.

👉 Consejo experto: si el cambio afecta a la duración o al precio, conviene revisar también la cláusula de fianza o depósito para mantener el equilibrio entre ambas partes.

Modelo de contrato de alquiler de vivienda para empresa y empleado

Cuando una empresa alquila una vivienda para alojar a un empleado desplazado, el contrato debe dejar claro quién asume la responsabilidad del arrendamiento.
Existen dos opciones válidas:

1. Contrato entre propietario y empresa:
   Es la fórmula más habitual. La empresa figura como arrendataria, se compromete al pago y designa al empleado como usuario de la vivienda. Es ideal para estancias temporales, proyectos de corta o media duración y alojamientos corporativos.

2. Contrato tripartito (empresa + empleado + propietario):
   Se utiliza cuando la empresa quiere que el trabajador figure como ocupante formal, pero manteniendo la garantía de pago empresarial. En este caso, el contrato especifica el vínculo entre las tres partes, limitando la cesión o subarriendo.

En ambos casos, el modelo debe incluir estas cláusulas esenciales:

• Identificación completa de propietario y empresa.
• Motivo del arrendamiento (uso temporal por desplazamiento laboral).
• Duración de la estancia y prórrogas posibles.
• Importe mensual y condiciones de pago.
• Responsabilidad sobre desperfectos, suministros y limpieza.
• Prohibición de cesión o subarriendo sin consentimiento.
• Procedimiento en caso de resolución anticipada.

👉 En Homyspace trabajamos con modelos de contrato verificados que protegen tanto al propietario como a la empresa, asegurando cumplimiento normativo, trazabilidad y soporte durante toda la estancia.

Penalizaciones por incumplimiento

El contrato puede incluir cláusulas de penalización en situaciones específicas, tales como: 

1. Retraso en la entrega de llaves al final del contrato (hasta 200 €/día). 
2. Retraso en el pago de la renta (intereses por demora). 
3. Desistimiento unilateral (con obligación de pagar la renta pendiente y otros posibles gastos). 
4. Estas penalizaciones son comunes en el alquiler corporativo y proporcionan seguridad jurídica al propietario. 

Legislación aplicable y resolución de conflictos

El contrato de alquiler debe incluir una cláusula que establezca la legislación aplicable (Ley de Arrendamientos Urbanos) y la jurisdicción competente. En los contratos de Homyspace, se define que los juzgados del lugar donde se encuentra el inmueble serán los encargados de resolver cualquier disputa legal.

Entrega de llaves y verificación del estado del inmueble

El contrato de alquiler debe especificar cómo se gestionará la entrega de llaves y la inspección del estado del inmueble. En el modelo de Homyspace, el arrendatario tiene un plazo de 24 horas desde su llegada para informar sobre posibles fallos o discrepancias en relación con lo prometido.  

Al concluir el contrato, se realiza una inspección conjunta para comprobar el estado de la propiedad y del inventario. Si no se encuentran problemas, se podrá iniciar el proceso para la devolución de la fianza. Este protocolo, claro y bien documentado, ayuda a evitar malentendidos y protege los intereses de ambas partes. 

Un contrato de alquiler bien redactado es la mejor garantía para proteger tu vivienda cuando alquilas a empresas. En el modelo de Homyspace se incluyen cláusulas específicas que contemplan todas las situaciones habituales en el alquiler temporal para trabajadores desplazados, con el objetivo de ofrecer transparencia, seguridad y profesionalidad a ambas partes. Además, contar con el respaldo de un equipo especializado permite gestionar cualquier eventualidad de forma ágil y eficaz, lo que convierte esta modalidad en una solución ideal para propietarios responsables que buscan rentabilidad sin complicaciones.